Llegan las vacaciones para muchos y en las calles de la ciudad se respira una tranquilidad solo habitual en los meses de verano. Lejos del bullicio del resto de año, os recomendamos que aprovechéis y disfruteis de vuestra visita a Sevilla sin colas.
Evitad dentro de lo posible las horas de más calor entre las 13:00-20:00, pero sin que esto os estropee vuestros planes de conocer esta maravillosa ciudad. Frente a “la caló” elegid vuestro abanico favorito (si es que podéis escoger solo uno) entre la multitud de estilos que encontraréis en las tiendas del centro
El siguiente paso es proponeros una ruta fresquita por la capital andaluza. ¡Tomad nota! Comenzamos con un recorrido por las fuentes más bonitas de la ciudad:
Fuente de Híspalis
También conocida como Fuente de Sevilla, se construyó con motivo de la Exposición Iberoamericana del 1929. Podréis encontrarla en la Plaza de Puerta Jerez.
Fuente de las Ranas
Se remonta al año 1914 y es la más antigua de todo el Parque de María Luisa. Su gran belleza hizo que su estructura se copiara en muchas fuentes de patios sevillanos.
Fuente de Catalina de Ribera
Se encuentra en el paseo del mismo nombre. Es del año 1921 y es una obra de Juan Talavera y Heredia, en honor de Catalina de Ribera, fundadora del Hospital de las Cinco Llagas.
Fuente del Dios Mercurio
Se trata de una de las fuentes más emblemáticas de Sevilla, ya que su presencia en este lugar se remonta al siglo XVI. Ha sufrido numerosas modificaciones a lo largo de los siglos.
Fuente de la Pila del Pato
Es de 1850 y se encuentra en la Plaza de San Leandro, aunque antes ha pasado por la Alameda de Hércules, el Prado de San Sebastián y la Plaza de las Mercedarias. La fuente, realizada en mármol con elementos renacentistas y surtidores con formas animales, debe su nombre a un pato de bronce que remata la pila.
Fuente de Neptuno Niño
Es de autor desconocido y data del siglo XVIII. Se encuentra en el Jardín de las Delicias de Sevilla y es presidida por un niño que sostiene una caracola.
Fuente de las Cuatro Estaciones
Se trata de una de las fuentes más imponentes de Sevilla que podemos encontrar en la Avenida de El Cid cuyo origen se remonta al año 1929.
Fuente-Farola de la Plaza Virgen de los Reyes
Es una de las fuentes más turísticas por encontrarse junto a la Catedral. Es de 1929 y es una obra de José Lafita Díaz.
Fuente de la Plaza de la Alianza
Del siglo XVIII, y con autor desconocido esta fuente se encuentra ubicada en el emblemático Barrio de Santa Cruz.
Fuente de la Plaza de España
Por último, pero la más especial, tenemos la fuente ubicada en el corazón de la imponente Plaza de España. Se trata de una gran fuente circular de 1929 hecha por Vicente Traver y Tomás, que continuaron las obras de Aníbal González.
Una vez vistas las fuentes más famosas y habernos refrescado un poquito en ellas, sin meterse claro, pasamos a las calles donde la temperatura desciende en comparación con el resto de la ciudad.
Santa Cruz es uno de los barrios más bellos y románticos pero también uno de los más frescos. Algunas de las calles que destacamos para pasear en estas fechas son:
Calle Reinoso
Este es su nombre original aunque nadie la conoce por él, sino por la calle los besos. Ubicada en el barrio de Santa Cruz, es la calle más estrecha de Sevilla, llegando a medir 106 cm en su punto más pequeño, de ahí que siempre de la sombra. En cuanto al origen de su popular nombre, se debe a una leyenda que cuenta que debido a la extrema cercanía de los balcones entre ambos lados, eran muy frecuentes los besos y saludos entre los propietarios de la calle.
Calle Aire
En esta calle de la antigua judería de Sevilla, como su propio nombre indica podrás agradecer esa habitual brisa que la recorre. Otra de sus características es su estrecha separación entre ambos muros (150 m) entre los que apenas caben dos personas al mismo tiempo.
Pero tranquilos esto no quiere decir que no podáis salir de estas calles. Pérgolas, sistemas de agua vaporizada y los veladores repartidos por el resto de la ciudad se encargan de crear su propio microclima.
Otra de las opciones que os damos es una visita cultural al Museo de Bellas Artes, la segunda pinacoteca más grande de España. Este espacio compuesto por un total de 14 salas, está adecuadamente climatizado por lo que te marcarás un 2×1, refrescándose y empapándome de cultura. Además la entrada solo cuesta 1,50 euros y ¡es gratuita para los ciudadanos de la Unión Europea!
Aquí os dejamos una propuesta del recorrido del museo http://www.museosdeandalucia.es/web/museodebellasartesdesevilla/propuestas-de-recorrido
Con la puesta de sol saldremos a conocer Sevilla de la forma más mágica posible, ¡¡¡un tour nocturno!! En una ruta a pie durante dos horas conoceréis los acontecimientos históricos más relevantes que se vivieron en la ciudad.
Comenzando en la Plaza del Triunfo realizareis la primera parada en uno de los barrios con más historia de la ciudad, el Barrio Santa Cruz. Sus calles han sido testigos del paso de diversas culturas como la romana, árabe y judía.
Si te apasionan las historias de misterio y las leyendas, el siguiente punto en el que os detendréis será la calle Fabiola. Cuenta la leyenda que al atardecer podréis escuchar las voces, llantos y susurros de los fantasmas que allí habitan. Para ir acabando pasaréis por la Plaza de la Alfalfa donde conoceréis el relato de un duelo a muerte. Por último llegaréis hasta la Calle Laraña, escenario de sucesos paranormales.
Si os ha gustado esta propuesta y queréis más info, estaremos encantados de ayudaros en la recepción de nuestro hotel Bécquer.
